martes, 31 de diciembre de 2013

Adiós 2013. Hola 2014.

Otro año se nos va, cada vez pasan más rápido los años. Este 2013 volví a salir de mi Pulpí natal para volver a instalarme en Almería, lleno de temores y añoranzas encontré un segundo hogar en el primer año, en el segundo mi vida la tengo repartida entre aquí y allí con un sentimiento de amor para las dos tierras. 

Si hago balance de este año, puedo poner pocas caras malas, pero cuando las he puesto y he necesitado una palmadita la he tenido. Tengo la gran suerte de tener unos primos que pasan a ser hermanos maravillosos. Ellos saben que los quiero, primos que algunos lo son de sangre, otros de corazón, gente de la que me enorgullezco de sacar pecho de decir que llevan mi sangre, la lleven o no.

Para este 2014 voy a tirar egoísmo, egoísmo ideológico claro. Este 2013 ha sido triste y serio año colectivo y social. Espero para este 2014, que los estudiantes sigamos recibiendo becas para poder estudiar, que no se nos suba más las matriculas; que este 2014 respetemos mucho más y luchemos mucho más por los Derechos Humanos, por esa barbaridad constante que pasa en nuestro mundo, que seamos conscientes y no normalicemos situaciones como las concertinas de la valla de Melilla, la guerra en Syria o la libertad sexual que se vulnera con la nueva Ley del Aborto, que nos enfademos y exigíamos Derechos Humanos; que dejen de robarnos, que se esclarezcan todos los casos de corrupción caiga quien caiga, que en los partidos políticos se acaben los palmeros, y que los del PP exijan esclarecer su financiación ilegal, y nosotros en el PSOE exijamos que se corten cabezas por los ERES y esclarecer la situación, que juntos nos unamos contra la mayor vergüenza que hay que es la corrupción política; que en definitiva alcemos la voz los de abajo para que no nos ninguneen más desde el poder económico y político, que alcemos la voz por nuestros derechos, que son nuestros, no de un partido político, alcemos la voz por nosotros, por nuestros hijos, y por nuestros abuelos que la alzaron para tener hoy una Democracia.

En fin, se acaba el primer año sin el pilar de mi familia, la base de nosotros, que esté donde esté sabe que la familia sigue unida, que tus nietos son como hermanos, que tus hijos son uno. Se acaba este año, y viene un 2014 que no digo que sea perfecto, pero por qué no un poco mejor.